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Se toca todo el rato igual, la única diferencia es que, en la estrofa 2, hay dos versos de más. Cejilla en 2º traste. Intro: Am 1.
Y allá arrCiba en aquel alto una viuAmda habitaba, ella teFnía una hija, TeresiAmna se llamaba, Y el que Fla pretendía y era prÃAm­ncipe de España. 1. Pasan tiempos vienen tiempos, Teresina embarazada, su madre desque lo supio empezaba a encomendarla: "En fuego te quemes niña, en fuego seas quemada"
2.
El prínCcipe que lo supio cayó muAmy malín en cama, llamaron siFete doctores de los mejAmores de España, unos dicFen que se muere otros dicAmen que no es nada, no siendo el Fdoctor mas viejo que le mAmiraba y callaba. 2. "¿Qué me mira buen doctor, que tanto me mira y calla?" "Lo que le digo Don Diego que disponga de su alma, tres horas tiene de vida y hora y media ya van dadas, y hora y media que le queda pa disponer de su alma" 1. Bien lo oyera el rey, su padre, que en altas torres estaba "Que poco dura mi hijo, que poco dura es mi alma..." "Bastante dure mi padre hasta que dios lo mandara, 1. ahí te queda Teresa, Teresina embarazada, padre, de lo que le di, padre, no le quite nada, no siendo un anillo de oro que le di de enamorada."
1 "Si tu le diste un de oro yo le daré un de plata, ella si trae una hija será monja en Santa Clara, ella si trae un varón será príncipe de españa" 2. Y estando en estas palabras Teresina allí llegaba. "¿De donde vienes Teresa tan cansada y fatigada?" "Vengo de Santo Domingo de oir misa en Santa clara, de rezar al dios del cielo que le saque de esta cama" 2. "De esta cama si por cierto no será mucha tardanza... De esta cama si por cierto mañana por la mañana, tres horas tengo de vida y hora y media ya van dadas, y hora y media que me queda pa disponer de mi alma" 1. Teresina oyendo esto siente la pena en su alma, siente la pena en su vientre y cae enferma en la cama. "En fuego te quemes niña en fuego seas quemada" 2. Él muere a la media noche, Teresina a la mañana. Y le abrieron el vientre y un niño lindo le sacan, los echaron los tres juntos en un ataúd de plata, y aquí se acaba la historia de los principes de España. (Silba y tararea) Creo que es difícil encontrar una historia más triste que esta. Se la dedico a Javier, que anda haciendo sus primeros pinitos con la guitarra, a Judo, a Sam, a Sari, a Anita que es mi niña y a todos los fans de Nacho Vegas.