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CLlegó la hora dGe dar las gracias Ca quien corresponda, dGecirle adiós Ca las morenas de cGaderas anchas, Clas rubias tristes de mentaG y limón.
A las muchachas en primavera, a todo el humo que ya es ilegal, al primer mono que pisó la uva de donde brota este manantial.
¡Qué mAmi almCa sea la bFarca adentrándose aGl mar! ¡QuéAm sean suCs velas disFueltas por el tempGoral!
EST
CGuiñad el ojo a unGa chica bella Cy perdonad a esteG pecador, Co perdonad a lasG chicas bellas, Cguiñad el ojo a estGe pecador.
Al darle pechos a las mujeres que gran idea tuvo el Señor. Y que franqueza al colocarlos justo delante del corazón. Llegó la hora de cerrar la barra y dispersarse por el boulevard, buscando a tientas una buena cama y si os consuela llamadle amor. ¡Qué mi alma sea la barca en el temporal! ¡Sentar mi cabeza esa hora nunca llegará! EST EST Cambia de tono Re La EST Guiñad el ojo a este pecador x2.