Karadeniz - Benito

Al verle ^Gcaballero, le dije aquí al Benito: "...Ese es^Bdim de los que nunca niega^D7 una ayuda..." No deje que le engañe mi abrigo descosido... Paso por una racha ^Cdimnegra y ^Gpeluda

pero tengo mi casa, no soy un m^G7uerto de hambre, sólo que últimamente ya no ^Cla e^Bdimmpleo. No soy como el B^Amenito^Cm... Tengo familia^G, sabe, ^A7 aunque hace mucho tiempo que no les ^D7veo.

Si es su gusto invi^Gtarme tomaré una copita... Hace un ^G7frío que pela por e^Csas calles. Acércate Benito^Cm, el caballero ^Ginvita... ^E7 Ponga dos de lo^Am mismo ^D7y Dios se ^Glo pague.

Tanto ^Gtienes, tant^D7o vales y pare usted ^Gde contar. ^{Bdim C}Hoy res^D7piramo^Gs, ma^E7ñana d^Amejam^D7os ^Gde res pirar.

Como le iba di^Gciendo, fue el cabrón de mi yerno el que me ^Bdimbuscó la ruin^D7a y les comió el tarro a toda la familia, que si esto, que si aquello, m^Cdimentira, se lo juro ¿M^Ge invita usted a un cigarro?

La gente, jefe, es mala y el mundo, un d^G7esatino. Mire, sin ir mas lejos, ^Ceste sujeto ^Bdim vend^Cería ^Cma su madre por un cart^Gón de vino. Â^E7¡Siéntate aq^Amuí Benito y ^D7estáte quieto!

¿Otra copita...^G? Bueno. ¡Por la gente rumbosa! Este claret^Bdime abre el ^D7apetito. ¿No le^C apetece^Cmría comer^G alguna cosa? El ^E7cuerpo lo agr^Amadece Â^D7¿Verd^Gad Benito?

Despi^Gértate Benito, se nos mojó la leña y así no hay quien encienda un fuego^D7 decente. Baja crecido el río, ya cubre hasta las peñas, tendremos que mudarnos bajo ^Gotro puente.

¿Sabes Benit^G7o? anoche, tuve un sueño virguero, me la pasé de charla y tomando^C copas en un sitio divino, con ^Cmtodo un caba^Gllero ¡y tú tamb^E7ién venías Benito^Am! ¡y había sopa!

Â?^D7?y gambas ^Gy chuletas y alubias con chorizo y ^G7café, copa y puro Como en los bueno^Cs tiempos! Benito ¿no me escuch^Cmas? ¿que te^G pasa Benito? ^E7 no vayas a mo^Amrirte^D7, no me hag^Gas eso.

^{G D7} Y pare usted de^G co^Bdimntar, h^Coy res^D7piramos^G, ma?^E7?ana de^Amjamo^D7s d^Ge res pirar.

No creo que te im^Gporte que encima de los míos me ponga para siempre tus cal^D7cetines. Al fin y al cabo, amigo, tú ya no tienes frío, perdona que te deje, sigue creciendo el ^Grío.