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A vAeces me pregunto ¿porqué yo?, y F#msólo me respondes porque quiero. EsD un misterio grande que nos Bmllames, aDsí tal como somos a tu eAncuentro.
Entónces redescubro una verdad, mi vida, nuestra vida es un tesoro. Se trata entónces sólo de ofrecerte, con todo nuestro amor, esto que somos.
¿QUÉ TE EDARE, QUE TF#mE DAREMOS?, SI TODO, TDODO ES TU REAGALO. TE OFRECEREE, TE OFRECF#mEREMOS, ESTO QUE SC#mOMOS... ESTO QUE DSOY,E ESO TAE DOY.
Esto que soy, esto es lo que te doy, esto que somos, es lo que te damos. Tu no desprecias nuestra vida humilde, se trata de poner todo en tus manos. Aquí van mis trabajos y mi fe, mis mates, mis bajones y mis sueños. Y todas las personas que me diste, desde mi corazón te las ofrezco. Estribillo Vi tanta gente un domingo de sol, me conmovió el latir de tantas vidas. Y adiviné tu abrazo gigantesco, y sé que sus historias recibías. Por eso tu altar luce vino y pan, son signo y homenaje de la vida. Misterio de ofrecerte y recibirnos, humanidad que Cristo diviniza.