Benjamín Rivera - El diablo

El diablo es un señor almid^B7onando, que nunca olvida el saco y el som^Ebrero Que vive en una casa con pla^B7cares para esconder el miedo y lo a^Ejeno

El diablo es tan correcto como el h^B7ambre, perfecto y ordenado como el fr^Eaude A v^Geces tiene panza y si no tiene, ^G es calvo como todos sus pla^B7cer^Ees.

El d^Ciablo tiene ^D7cola mas la esc^Gonde en g^B7rueso portafolio color ^Enegro, Donde l^Cleva tamb^D7ién los doc^Gumentos que lo auto^B7rizan a matar al pueblo.

El di^Eablo pone el alma en las tri^B7bunas, y escucha los discursos de los mu^Eertos Se arrastra con orgullo por la his^B7toria y se acuesta con pobrísimos r^Eecuerdos.

El diablo se levanta muy tem^B7prano, cansado del confort que lo enca^Edena Y corre por las calles presu^B7roso de compartir su hastío y ^Esu pena.

Lo he visto muchas veces como us^B7tedes en el espejo o el bolsillo de cualqu^Eiera, En el seg^Guro que asegura todo, ^G menos la paz, la luz,^B7 la prima^B7ver^Ea.

Lo he v^Cisto cami^D7nar al lado m^Gío y me^B7dir la moral y las pol^Eleras deci^Cdir el ta^D7maño de la^G dicha, la jus^B7ticia, el honor y las ideas.

Lo he ^Evisto muchas veces pero a^B7hora, mi alegría habla claro de su^E ausencia Quizás sus propias manos lo m^B7ataron para cumplir al fin con su conci^Eencia.

Quiz^Gás sus propias manos lo mataron ^G para cumplir al fin^B7 con su conci^B7enc^Eia.

laralaralaralarala^B7rara laralaralaralarala^Erara Quizás sus propias manos lo m^B7ataron para cumplir al fin^B7 con su con^Cci^Amenc^Eia.