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Tuning: E A D G B E
Nunca esGmtamos conformes del quehaD7cer de los demás y viBb7vimos a solas sin penEbsar en los demás, como G#7lobos hambrientos, acecC#hando a los demás, convencF7idos que son nuestro aliBbmento, los deD7más.
Los errores son tiestos que tirar a los demás; los aciertos son nuestros y jamás de los demás; cada paso un intento de pisar a los demás, cada vez mas violento es el portazo a los demás.
Las verG7dades ofenden si las D7dicen los demás, las meF7ntiras se venden, cuando cBbompran los demás; somos jEbueces mezquinos del vaCm7lor de los demás pero D7no permitimos que nos juGm7zguen los demás. ApaG7gamos la luz que, por amCm7or a los demás, encenF7dió en una cruz, El, que muD7rió por los demás; porqueGm son ataduras, comprenD7der a los demás, camiEbnamos siempre a osD7curas sin penEbsar eon los deGmmás.
Nuestro tiempo es valioso, pero no el de los demás; nuestro espacio, precioso, pero no el de lo demás, nos pensamos pilotos del andar de los demás; donde estemos nosotros... que se jodan los demás. Condenamos la envidia, cuando envidian los demás, más lo nuestro es desidia, que no entienden los demás. Nos creemos selectos entre todos los demás; seres ""pluscuamperfectos"", con respecto a los demás. Y olvidamos que somos, los demás de los demás; que tenemos el lomo como todos los demás, que llevamos cuestas, unos menos y otros más, vanidad y modestia como todos los demás... Y olvidando que somos los demás de los demás, nos hacemos los sordos, cuando llaman los demás porque son ""tonterías"" escuchar a los demás, lo tildamos de ""manía"" al amor por los demás.