Abel Velázquez - Nada m

Llora en sil^Eencio, Llueve de p^Fmaj7ronto de sus ojos, el sil^Eencio, Llora e ima^Fmaj7gina que se ha vuelto a equivoc^B7ar su corazón, Una her^Aida que se abre, más pro^Dfunda hacia el dolor, No espera n^B7ada que no sea capaz de d^Ear, Tan solo qui^Aere que alguien muera, por am^B7or a su mirada, Y nada ^Emás.

Se fue perdi^Eendo, Entre prom^Fmaj7esas que buscaban siempre^E el cielo, Miles de b^Fmaj7esos que no llegan, Yo te qui^B7ero, tú tan cerca, yo tan ^Alejos, Y lo de m^Dás, es casi siempre lo de^B7 menos, Ella no pide nada que no pueda d^Ear, Tan solo qui^Aere que alguien muera, por ^B7amor a su mirada, Y nada m^Eás. ^E7

Apiádate de ^Amí, Yo que no t^Dengo ni promesas, ni sil^Bencios ni estrategias, Yo que no es^B7pero nada que, no pu^Eeda dar, Tan solo qui^Aero ser quien muere, por ^B7amor a tu mirada y nada m^Eás.^E7

Apiádate de^A mí, Que tengo ll^Danto a manos llenas, para l^Blover tu soledad, Yo que no esp^B7ero nada que, no pueda da^Er, Tan solo qui^Aero ser quien muere, por am^B7or a tu mirada, y nada m^Eás.

Y me mir^Eó, Con las pro^Fmaj7mesas que bajaron, desde el c^Eielo, Miles de b^Fmaj7esos que ahora llegan, Yo la qui^B7ero ella tan cerca y yo n^Aaciendo, Y lo dem^Dás, se ha convertido en lo de ^B7menos, Ella no pide nada que, no pued^Ea dar, Yo solo s^Aoy, ese que muere, por am^B7or a su mirada, Y nada^E m

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y ^Cnada m^Eás

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