^GUn dÃa llorarás sangre, ^Dtu alma estará espesa com^Emo tierra, cegado y obligado a andar a ^Ctientas por un^Ga garra hostil y cru^Am7el... ^GTe desconocerás, ^D?angustia? será el sol que te a^Emmanezca; tu luna, ?soledad?... Â¿ Qué vid^Ca es esta ? Â¿^G Este soy yo ? ^Am7Â¿ AdÃ³^B7nde he caÃdo ?

AC^EmUÃRDATE DE^BmL CRISTO, QUE DESCEND^CIÃ^D A LOS ^GINFIERNOS. AF^EmÃRRATE AL ^BmCRISTO, QUE DESCEND^CIÃ^D A LOS ^GINFIERNOS. Cuando l^Emlegue tu hora, incor^Dpora en tu fe a ese C^Aristo^Am... TAMB^EmIÃN EN E^BmL ABISMO BRILLÃ ^CLA ^DREDEN^GCIÃN !

Un dÃa no habrá en tu alma ningÃºn cartel indicador hacia tu Dios. -Lo habrá robado una mano burlona- y ni a rezar te atreverás ... Infinita distancia, la amada comunicaciÃ³n perdida. (Más duro que dudar de su existencia, saber que Ãl es ... y tenerlo perdido). ACUÃRDATE... AFÃRRATE... TodavÃa te queda en el Ãltimo LÃmite Cristo... TAMBIÃN... ! Nadie lloverá en tu alma su gota de ternura. Y te sacudirá -como ráfaga helada en tu conciencia- abandonado, Cristo en Cruz. Y verás a tu lado andar errantes tus hermanos jÃ³venes, y te rodarán Bosnia y otras lágrimas, y llorarás tu salmo de amarguras ... ACUÃRDATE... AFÃRRATE... Mirarás tu ciudad con sus ojos que son compasivos... TAMBIÃN... ! Comprenderás de pronto -partido en dos o en mil, por tu pecado- que eres y que todos somos Lázaro y el pobre Hijo PrÃ³digo; y en el no-amor sabrás que hasta el espanto Dios bajÃ³ a alcanzarte y para el corazÃ³n, quizá, ablandarte El te abismÃ³ en su misericordia. ACUÃRDATE... AFÃRRATE... Ante Ãl la rodilla se doble, aÃºn en los abismos... TAMBIÃN... !

Mokara - Descenso a los infiernos