Autoscroll
1 Column
Text size
Transpose 0
Hasta tu Dmreja vengo aD7mada Gmmía, por tu cC7ariño
que yo ansíoF tanto,
escucha el Dmeco de mi Bbtriste A7canto, es el emblema
de un cálido Dmamor.
Bella mujer de angeliD7cal terGmnura, tus ojos C7tienen
mil encantos Fpresos...
en el soGmpor de aquellos Dmbesos, quisiera mi A7alma
morir meDmjor,
no oD7ís comoGm llora mi triste guDmitarra....
que un dolor aC7margo es el que te imFploro,
hoy al deshoA7jar esta margaDmrita,
la Gmúltima hDmojita meA7 dijo queDm no;
al Gmverla viDmvita, mi aA7mor aumenDmtó.
Soy tu poDmeta soñD7ador queGm siempre,
hace ronC7delas para tu hermoFsura,
mas esta Dmnoche no sé siBb es lA7ocura,
la que me indujo a llegar hasta aDmquí.
Busco ese sol de tus miD7radas Gmhondas,
no sé si C7abrigas en tu pechoF nieve...
no hagáis queGm sea mi vidaDm breve,
yo te idoA7latro con freneDmsí,
D7 Gm Dm
no Abrís E sultana, sin duda ninguna...
que un rayo de C7luna entre a tu venFtana,
para acariA7ciarte en mi sereDmnata,
con Gmbesos de Dmplata tu A7boca senDmsual,
tus Gmojos diDmvinos, muA7jer inmorDmtal.